La iglesia de la Virgen del Carmen de
Benavente celebra en este año de 2018 sus Bodas de Oro, 50 años han pasado
desde que el 16 de Julio de 1968, siendo cura ecónomo D. José Muñoz Miñambres,
el obispo de Zamora, D. Eduardo Martínez González, consagrase esta iglesia. Desde
ese momento es la continuadora y depositaria del legado de la antiquísima
Parroquia de Renueva que tiene sus orígenes en tiempos de la repoblación de la
histórica Villa por el rey leones Fernando II.
El proceso constructivo de esta iglesia se
ha realizado en dos tiempos distintos y discontinuos. Las obras comenzaron por
iniciativa de D. Julián Fernández Diez (había tomado posesión como cura párroco
de Santa María de Renueva en junio de 1927) mediante una cuestación popular en
1929, colocándose la primera piedra el 30 de septiembre de 1930. La situación
política, económica y el inesperado fallecimiento (octubre de 1936) de su
promotor paralizaron las obras.
Años más tarde (1963) con la llegada de D.
José Muñoz Miñambres y ante el estado de deterioro que presentan las dos iglesias
de la parroquia (San Andrés y Renueva) se recupera, en 1965, el proyecto
inacabado para finalizar las obras tres años después.
En
esta sencilla y moderna iglesia no encontraras blasones de linajes, sus muros guardan
la devoción de un pueblo a Santa María del Monte Carmelo; la devoción a un
Cristo sanador, al que se le pide salud para el cuerpo y paz para el alma. Aquí
se guarda la memoria de tradiciones perdidas: María encinta que recibía solemne
culto en aquellas afamadas ferias de septiembre que celebraba la ciudad. Lucia
de Siracusa, Santa protectora de sastres y modistas, cuando estos oficios
abundaban en la parroquia. San Miguel, patrono de los hortelanos que supieron
sacar los mejores frutos de estas fértiles tierras. Santa Eulalia, mártir en la
Augusta Emerita, recuerdo de antiguos tiempos, cuando la villa pertenecía a la
Diócesis de Oviedo.